Antes de proceder a detallar las posibilidades de instalación que tenemos al alcance para los distintos tipos de sistemas de sonido en casa, recordemos que en la guía Cómo planificar la instalación eléctrica de tu vivienda, disponible completamente gratis, podemos hallar algunas instrucciones útiles que nos permitirán complementar la información que ofreceremos a continuación: no debemos olvidar que cualquier sistema de sonido en el hogar requerirá una o varias tomas de corriente que lo alimenten, por lo que la utilidad de la guía mencionada queda fuera de toda duda. A ella remitimos al lector en lo referente a la alimentación eléctrica de los sistemas de sonido, un asunto que para evitar redundancias no trataremos a continuación.

Dejando, pues, la alimentación eléctrica a parte, consideraremos dos tipos de sistemas de sonido en casa que podemos usar para describir la instalación básica de los mismos, aplicable a otros sistemas semejantes: juego y entretenimiento, por un lado, y por el otro sistemas de sonido indicados para el descanso y/o el acompañamiento (complementarios a otras actividades).

Recuerda que puedes descargarte nuestra guía gratuita sobre sistemas de sonido en casa con información, curiosidades y consejos:

Sistemas de sonido en casa para juegos y entretenimiento

Bajo esta consideración podemos agrupar sistemas de sonido integrados en instalaciones de home cinema, por ejemplo, o salas de juego multimedia. Se cual sea nuestro caso, las características comunes de estos sistemas de sonido se pueden resumir del siguiente modo:

• El sonido juega un papel principal: la inversión en algunos dispositivos será mayor.

• El espacio es limitado: se limita a estancias concretas, como salones o salas de    juego.

• La exposición de los dispositivos es mayor: los riesgos de sufrir golpes o cualquier otro tipo de percances es más elevada, por lo que deberemos protegerlos adecuadamente.

Teniendo estos aspectos en cuenta, lo primero que deberemos hacer es elegir el lugar apropiado para los dispositivos principales y más sensibles: fuentes, amplificadores y altavoces.

Contar con un armario cerrado, por ejemplo, o un mueble especialmente diseñado para contener las fuentes y los amplificadores manteniéndolos a salvo y a buen recaudo es casi preceptivo. Al mismo tiempo, deben ser accesibles para poder ser manipulados a conveniencia, cómodamente y sin elementos que interfieran entre la ubicación habitual del/los usuarios y el lugar en que dichos componentes se concreten, con el fin de facilitar su manipulación y configuración remota mediante mandos a distancia, por ejemplo.

También debemos tener en cuenta el recorrido de los cables y los conectores: debemos evitar en lo posible que entren en contacto con los cables de la instalación eléctrica, los cuales pueden causar interferencias, y procurar que su recorrido sea lo más justo y reducido posible.

Debido a sus características, y a las dificultades y los costes añadidos que representaría empotrar la instalación en las paredes, el uso de regletas y canalizaciones de plástico está especialmente indicado para este fin, procurando en todo momento aprovechar la estructura del espacio para disimular en la medida de lo posible su ubicación.

En lo que respecta a los altavoces, si se opta por dispositivos coaxiales se debe determinar, en primer lugar, el espacio concreto que ocuparán los usuarios para orientar los altavoces hacia ese punto, disponiéndolos de tal como que el sonido que emitan converja en él. Si se opta por altavoces de vías separadas, se deberán atender las especificaciones del fabricante teniendo también en cuenta, como principio general, lo dicho para la instalación de altavoces coaxiales.

Sistemas de sonido en casa para el descanso y el acompañamiento

Este tipo de sistemas de sonido, como los hilos musicales o la distribución de otro tipo de sistemas procedentes de fuentes diversas (receptores de radio, reproductores multimedia, etc.), presentan también algunas características comunes, que detallamos brevemente a continuación:

• Son sistemas de sonido pensados para cubrir grandes espacios: interiores, exteriores, baños y cocinas, despachos y dormitorios o el domicilio en su conjunto, algunos especialmente sensibles o expuestos a elementos peligrosos y/o dañinos para algunos componentes de la instalación.

• El sonido desempeña un papel secundario: su función es la de acompañar, potenciar el descanso o hacer más llevaderas las tareas domésticas, por lo que la calidad del sonido puede ser inferior a la de los sistemas destinados al entretenimiento.

• Requieren un sistema de centralización versátil, flexible y accesible desde distintos puntos: si nos hallamos en el dormitorio, por ejemplo, y los dispositivos principales del sistema están ubicados en otra estancia, puede resultar engorroso e incómodo tener que desplazarnos para acceder a sus controles (volumen, programación...). Por ello, como veremos más adelante, los sistemas integrales de sonido están especialmente indicados para este propósito.

Como en el caso de los sistemas de sonido destinados al juego y el entretenimiento, también en estos debemos evitar el contacto de los cables y los conectores con los elementos de la instalación eléctrica domiciliaria.

La concreción de la fuente de sonido debe ser accesible y a la vez estar protegida de golpes y cualquier tipo de percance, aunque dadas sus características su protección resulta más sencilla al tener que incorporar dispositivos de control secundarios, accesibles desde distintos puntos de la vivienda para evitar las incomodidades comentadas.

La ubicación de los altavoces (los cuales, en este caso, se recomienda que sean de tipo coaxial) puede ser empotrada (siempre que sea posible), con especial predilección por techos falsos y/o tabiques de tipo pladur, por la facilidad de manipulación que presentan las placas fabricadas con este material. También, en la medida de lo posible, empotraremos la instalación de los cables y conectores o, en su defecto, usaremos regletas y guías como en el caso anterior.

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